Aunque en la sesión de clasificaciones y peleas mandatorias dentro de la 31era convención anual de la Organización Mundial de Boxeo se dijo que Jaime Munguía se perfila para enfrentar al japonés Takeshi Inoue en diciembre entrante, el propio peleador tijuanense explicó a ESTO que este potencial duelo aún no está cerrado y esperará en los próximos días noticias de su promotor Fernando Beltrán para definir fecha y rival.  

Incluso, indicó que de no concretarse esta pelea para ese mes, tendría como plan B defender su campeonato en enero del 2019.

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“Todavía es una posibilidad (enfrentar a Inoue), nada seguro, yo espero nada más conocer el nombre y estaré listo para el que me digan. Se rumora que podemos ir el 15 de diciembre (en el respaldo del ‘Canelo’ Álvarez), pero tampoco es un hecho. Podría ser diciembre o enero la fecha en que me toque defender de nuevo mi título”, externó el púgil fronterizo.

Apuntó que en lo personal le agradaría cerrar el año con una tercera defensa de su corona de la WBO en las 154 libras.

“Me gustaría cerrar el año con una defensa más, darle otro espectáculo a la gente, pero hay que ver lo que dice mi promotor”.

AGRADECE PALABRAS DE APOYO

En torno a los comentarios que compartió el presidente de esta entidad boxística, Francisco Valcárcel, refiriéndose a Munguía como un campeón mundial sensacional, siendo una gran realidad del boxeo de nuestro país, el mexicano agradeció las palabras del dirigente puertorriqueño.

“Es un honor que el presidente de la WBO se exprese así de mí, es un gran orgullo y una enorme responsabilidad de seguir trabajando duro”.

Tras el cierre de esta reunión internacional con la Cena de Gala, el mexicano voló a Los Ángeles con enorme gesto de satisfacción por lo que ha sido este 2018.

“No me esperaba así este año, pero se nos han dado las cosas, hemos sabido aprovecharlas, siempre me ha gustado estar entrenando. Cuando peleé por el título del mundo me avisaron dos semanas antes, yo estaba listo, estaba entrenando, imagínate ahora como campeón, entrenó al doble y con más hambre de triunfo”, finalizó el mexicano, quien recibió una placa conmemorativa a su reinado en esta división, como “un pegador devastador”.