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2, noviembre 2018 - 18:07

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ACCIONES

Crónica

Tigres no estaba muerto, andaba de parranda.
Después de hilvanar tres partidos sin conocer la victoria, los felinos resurgieron de entre los muertos y luego de vencer 2-0 a Morelia se enfilan para cerrar con todo de cara a la Liguilla.
Los goles de Juninho y Enner Valencia, aunada a la expulsión de Achilier y un polémico penal a favor de los felinos, pusieron los clavos al ataúd de Monarcas.
Los michoacanos cortaron una racha de tres victorias y en el día de muertos podrían caer hasta la décima posición y alejarse de zona de clasificación.
Bien dicen que los de Ricardo Ferretti pueden no iniciar de buena manera, pero la forma en la que llegan a las últimas jornadas es lo que los hace firmes candidatos al título.
El plato está servido para que los universitarios avancen en la tabla general, pues recibirán a Puebla y visitarán a Chivas en la última jornada; mientras que Morelia viajará a Tijuana la próxima semana y cerrará el torneo regular ante Cruz Azul.

EL PARTIDO
A un par de juegos de que termine la fase regular, una victoria era importante para ambos conjuntos, por lo que pusieron toda carne al asador.
La primera llegada fue de los locales. Carlos Fierro sacó un centro peligroso, pero Nahuel mandó a tiro de esquina. Sebastian Ferreira fue el segundo, disparó cruzado, pero el balón se fue por un lado.
Tigres comenzó con toques, trató de ponerle calma al balón y controlar el partido, pero Morelia era superior.
El primer contacto que tuvo Sebastián Sosa, que a la postre se convertiría en el héroe, fue por un disparo de Giganc. El francés mandó un zapatazo, pero el uruguayo se quedó con él.
Cuando parecía que Monarcas sería superior el resto del encuentro, la expulsión de Gabriel Achilier equilibró las balanzas. El capitán de la monarquía llegó tarde y le metió una plancha a Javier Aquino. El juez central fue llamado por el VAR para checar la jugada y después de verla un par de ocasiones, decidió echar al zaguero michoacano. Achilier se quedó impávido y como si fuera zombie se fue a los vestidores.
A raíz de la expulsión, Sebastián Sosa se convirtió en el hombre del partido. El uruguayo siempre estuvo atento.No se tragó la finta de Juninho y tajante rechazó un riflazo de Gignac. Rechazó disparos de Aquino, Carioca y Durán.
Los michoacanos intentaron contrarrestar los ataques felinos colocando cinco hombres en la zaga, pero el más importante de la noche fue su guardameta.
El conjunto de Roberto Hernández encontró un par de oportunidades por la banda derecha, gracias al “güero” Fierro. El ex de Chivas y Cruz Azul le ganó la carrera a Jesús Dueñas, pero en el centro del área no encontró rematador.
Tigres continuó presionando, pero no consiguió dar el zarpazo.
En tiempo de compensación, Rodolfo Vilchis tuvo la oportunidad de poner adelante a su equio, pero el balón se va por encima.
En el complemento, los universitarios entraron con todo. La desesperación se apoderó de los locales. Morían lentamente, mientras un tigre hambriento los devoraba.
En una jugada polémica, el silbante marcó una pena máxima a favor de los regiomontanos. A pesar de las reclamaciones, no consideró necesario utilizar el VAR.
Juninho pidió el balón y lo colocó en el manchón. La tranquilidad del brasileño contrastó con los brincos que pegó Sosa en el arco. Gol de Tigres.
El “Tuca” apostó por dos cambios que a la postre los encaminarían a la victoria. Sacó a Edu Vargas y Rafael Durán e ingresó a Enner Valencia y Julián Quiñones.
Morelia atacó y buscó el empate, pero desatendió la zona defensiva. Quiñones recuperó en propio terreno, mandó un pase largo a Valencia, quien sin más puso el segundo clavo al atáud michoacano.
La entrada de Diego Valdés y Edison Flores refrescaron el ataque de la Monarquía, pero no bastaron para emparejar los cartones.

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