POR FERNANDO VILLA

FOTOS: ÉRIK ESTRELLA

ENVIADOS ESPECIALES

Morelia.- Pumas y Morelia no se hicieron daño en un duelo en el que la madre naturaleza se llevó de calle. La tormenta eléctrica que azotó Morelia dejó en pausa un cotejo que se quedó a escasos minutos de cumplir los 90 minutos reglamentarios. Al minuto 84, el silbante Roberto García Orozco mandó a todos a los vestidores para cuidar la integridad de los planteles.

Los gritos se hicieron presentes con los constantes rayos que azotaron el cerro del Quinceo y el juego no dio para más.

Pumas no alcanzó el liderato, pero el punto le bastó para seguir en la parte alta de la tabla, mientras Monarcas llegó al quinto juego sin conocer la victoria.

EL JUEGO

Pumas quería conservar a buena racha. Salió con todo a la cancha del Morelos. Patiño hizo un cambio de último minuto. Puso a Iturbe por banda izquierda ante la ausencia de Martín Rodríguez, quien tuvo que atender problemas personales.

Sin embargo, los universitarios salieron sin miedo. De inmediato mostraron la garra y se adueñaron del esférico. Fue un descuido de la zaga cuando Sandoval tuvo una de las pocas de peligro para Monarcas. El peruano disparó de pierna derecha cuando ingresó al área, pero Saldívar mandó a tiro de esquina.

Después del susto, los auriazules se ordenaron de nuevo y no le prestaron el balón a los de casa. Tuvieron varios ingresos al área, sobre todo por la banda derecha, donde Barrera hizo de las suyas; sin embargo, no capitalizaron.

Malcorra dio el primer rugido, aunque no mordió. Cobró un tiro libre que se fue por un lado de la meta de Sosa.

Los cachorros también mostraron su colmillo. Mozo ingresó al área en una copia del gol que le hizo a Necaxa en la fecha dos. La diferencia, Sosa atajó de buena forma.

Fue otra vez por los botines de Malcorra que llegó el tercer aviso de Universidad. No dio por perdida una pelota que iba a línea de fondo y mandó un centro al manchón penal al que Mora le llegó de un testarazo. Sosa se revolvió como pudo y salvó su marco al sacar el balón de la línea de gol. Morelia vivía.

Pumas fue superior en el trámite del juego. No prestó el balón y fue siempre para adelante. Mora y González, las armas fuertes, se quedaron con las ganas.

Otro descuido de los capitalinos casi les costó la desventaja. Malcorra dio un mal pase y al final Ferreira le dio al “Pollo” un recargón en el área para enviar el balón a las redes. El silbante señaló la falta. Sin más acciones de peligro, el central mandó a todos a descansar.

En el complemento, fue la visita la que marcó el ritmo. Los de Roberto Hernández salieron tibios del vestidor y apenas dieron batalla; sin embargo, conforme avanzaron los minutos, contrarrestaron el trámite del juego y demostraron quien manda en el territorio purépecha.

El “Pipila” disparó de lejos y el “Pollo” recostó de forma quirúrgica para evitar el gol en la que fue una de las aproximaciones más claras.

Por las bandas fue que la monarquía quizo cazar al puma. En todas las ocasiones, el “Pollo” fue quien salvó a su equipo. Lució seguro y pese a la lluvia que comenzó a caer en el coloso del cerro del Quinceo, no dio rebotes que pusieran en peligro el marcador.

Aldo Rocha se internó por derecha y Saldívar volvió a ser figura cuando le achicó al mexicano tras la carrera.

Pumas no mostró las garras. Los cambios de Patiño no surtieron un efecto positivo como en otras ocasiones. Al final, fueron los de casa los que terminaron encima, mientras los universitarios esperaron el contragolpe.

La lluvia apretó, pero no sólo eso, sino que los rayos fueron constantes y el silbante no lo pensó dos veces al suspender el partido a escasos minutos del final. La gente abandonó el recinto y dieron la señal que no se jugaba más por seguridad de todos. Pumas y Morelia no se hicieron daño al final de la noche, una que fue muy larga para los michoacanos.