Copenhague.- La Selección Mexicana no cayó en desánimos ante la caída vikinga de los daneses. Al contrario, el grupo tuvo una nueva “encerrona” y ahí nuevamente cerraron filas para lo que viene.

El grupo no quedó agobiado por la caída, se curó en plática, análisis y reflexión. Se plantearon y replantearon todo lo hecho en la cancha, así como lo relacionado en los últimos días en cuestiones extracancha.

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Platica entre cuerpo técnico, jugadores y el coaching del equipo, Imanol Ibarrondo, sellaron muy bien el ánimo. El especialista quiere a todos concentrados para el reto que viene, por lo que dejaron atrás la caída ante Dinamarca y ya ven hacia delante.

Juan Carlos Osorio también fue apreciado entre la reflexión y meditación, comprendió que perdieron sencillamente y errores puntuales no pueden repetirse menos frente a la campeona del mundo.

Sensatos y concentrados se vio a varios de los jugadores, quienes después de trabajar de manera regenerativa en el gimnasio del hotel, se dedicaron a disfrutar de la tarde libre con caminatas y risas a través de la agradable Copenhague.

El grupo se hizo más fuerte. Las pláticas dejaron un gran ánimo, valoraron lo hecho en la cancha y hablaron largo y tendido luego del entrenamiento. Las charla esperan rindan frutos y el grupo está más unido que nunca, por lo que disfrutaron de la ciudad a través de caminatas y rodada en bicicleta como en el caso de Andrés Guardado y Guillermo Ochoa.

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La filosofía es hacerse más fuertes conforme transcurra cada día del Mundial, prometen que así será y solamente ponen buenos ánimos para la justa en donde los siguientes retos se llaman Alemania, Corea y Suecia.

Así lo remarcan Carlos Salcedo, Raúl Jiménez y Jesús Corona, quienes se le vio fuertes y nutridos para lo que viene, y ta,bién a ootros dos líderes del gruo como en el caso de Guardado y Ochoa, quienes hasta convivieron con el paisano Fernando Cortés.  (Luis García Olivo/ Fotos Jorge Barrera)