El estadio Olímpico de Sochi, el estadio Fischt, está listo para todo y lo que se le avecine. El inmueble de la ciudad cumplió con los estándares de la FIFA para la Copa Confederaciones y hará lo mismo de cara a la Copa del Mundo de Rusia 2018, pues para muestra logró una estupenda inauguración y clausura en los Juegos Olímpicos Invernales en 2014.

El estadio presume su enorme techado que no termina por cubrir toda la cancha, éste se pinta de colores cuando cae la noche. Por momentos se ilumina con los tintes de las banderas alemana, mexicana y rusa, por lo que es un espectáculo para el que lo disfruta.

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El mar a lo lejos regala una excelente combinación y las letras con la leyenda Russia 2018 es la principal encomienda para cautivar a todo el mundo y no como es ahora con las ocho selecciones que participaron en la Confederaciones.

Desde Sochi, desde el estadio Fischt, está la cuenta regresiva para el Mundial del próximo año, en donde nuevamente jugará el Tricolor.