La fecha límite, establecida en un inicio para el 15 de enero, fue movida dos días debido a una festividad en tierras norteamericanas, por lo que Dean Spanos, dueño de la franquicia, tendrá 48 horas más para determinar el futuro de su franquicia.

Los “Bolts” han pasado los últimos 56 años en la ciudad de San Diego, donde han logrado establecer una base de aficionados relativamente sólida, sin embargo en las últimas temporadas el público ha dejado de presentarse con regularidad en el estadio Qualcomm debido principalmente a la falta de resultados.

En caso de decidir mudarse a Los Ángeles, donde originalmente se estableció la franquicia en 1959 en la extinta Liga Americana de Futbol (AFL), compartirían el estadio Coliseo con Carneros, quienes arribaron a la urbe angelina en la presente temporada 2016 provenientes de San Luis.

De esta forma, si Spanos se inclina por mantener la franquicia en San Diego deberá invertir una suma considerable en el actual estadio y la comunidad aledaña, luego de que Roger Goodell, comisionado de la Liga, anunciara que esa localidad pronto dejará de ser un lugar adecuado para albergar un equipo con los estándares de la NFL.

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