La NFL revisará si se siguió adecuadamente el protocolo sobre conmociones cerebrales en el partido de postemporada entre Miami y Pittsburgh, don el quarterback Matt Moore se llevó un duro golpe.

Moore recibió el impacto en el mentón cuando lanzaba un pase. El golpe derivó en que Bud Dupree, de los Acereros recibiera un castigo por un contacto a destiempo sobre el mariscal de campo.

El personal médico de los Delfines atendió a Moore en el terreno. A un costado del mismo, el jugador fue evaluado por un consultor neurológico independiente y por el médico del equipo, antes de regresar al encuentro.

Moore se perdió sólo una jugada del encuentro, que Miami terminó perdiendo (30-12).

Bajo los términos del contrato colectivo, la NFL, en coordinación con el sindicato de jugadores, debe revisar documentos y videos, así como entrevistar a las partes involucradas, para determinar si se siguió debidamente el protocolo sobre conmociones cerebrales.

Moore negó que hubiera sufrido un problema grave. “Sólo necesité un segundo. Me golpearon, pero me sentía bien y volví. Fue más el dolor en la mandíbula que otra cosa”, indicó después del partido.

El entrenador Adam Gase no atribuyó los errores posteriores del pasador a algún efecto del golpe. “Cuando me dijeron que volvía, comencé a hablar con él y estaba bien. La liga hizo su trabajo, lo mismo que nuestros entrenadores y todos dieron la aprobación”, explicó.