10, junio 2014 - 20:02
herrera
POR MANUEL GÓMEZ C.
FOTOS: JESÚS TÉLLEZ
ENVIADOS ESPECIALES
SANTOS.- La Selección Mexicana cumplió este martes su tercer día en esta ciudad de Santos, donde el público la ha arropado, la ha mimado, bueno, le ha dado esas muestras de cariño, de aprecio, de hermandad, meramente deportiva.
Dicha gente lo hace desde temprano, aunque en esta ocasión lo hizo en minoría, con respecto de otras mañanas.
Desde que el Tri sale de su hotel de concentración (por las mañanas) rumbo al Club Santos FC, donde realiza sus trabajos de preparación, la gente le sonríe, le aplaude, lo vitorea, y ese gesto, ese detalle es tan importante que al equipo que dirige Miguel Herrera lo motiva a mantener el buen ánimo.
Tercer día de trabajo.
Otra mañana nublada, con lluvia, pero, por ningún motivo impide que se entrene.
Esta vez, completamente a puerta cerrada.
Ni cámaras fotográficas, ni televisoras.
Nadie es nadie.
Miguel Herrera quiere privacidad.
Sólo un “Piojo”, cuerpo técnico y seleccionados, ahí, en una de las canchas, trabajando.
Y en la portería de titular apareció Guillermo Ochoa, mientras que en su demás equipo, los mismos hombres que iniciaron el partido ante Portugal, allá en Foxboro.
Mientras que la policía federal vigila los sitios y calles aledañas a las instalaciones que vieron crecer a Pelé, a Robinho, a Neymar, para evitar que haya espías que pretendan observar los ensayos de México, como en su momento lo hizo una televisora brasileña.
Ultimar detalles, la misión.
Ahora sí, a practicar nuevas cosas.
Ya se terminaron los juegos amistosos, en los cuales, quizá, el cuerpo técnico de guardo algunas cosas, y ya de cara al partido contra Camerún, a mostrar su arsenal.
A trabajar variantes, poner atención en el cobro de faltas y envío de centros, para no ser sorprendidos, asi como trabajar en la definición… ser contundentes.