FOTOS: ÉRIK ESTRELLA / ENVIADO ESPECIAL

GUADALAJARA.- Arterias rojiblancas y celestes recorren el corazón de Lupillo Castañeda, el zacatecano vistió ambas camisetas, con Cruz Azul fue campeón (Verano 1997), pero con Chivas cumplió el sueño que tuvo de niño, casi una década con el equipo capitalino, dos años y medio con el tapatío, decidirse por alguno es complicado, pero al final el cariño es un poco más ¿para?, el chiverío.
“El afecto es para los dos, pero no puedo esconder que siempre quise jugar en Chivas, llegué a vivir a Guadalajara de pequeño, me gustaba ir al estadio, verlo siempre lleno, cuando pase de Cruz Azul a Chivas fui muy feliz”, reveló Castañeda a ESTO en la comodidad de su hogar.
El Rebaño es el equipo donde soñó jugar, pero el tiempo que pasó en la Noria le hizo tomarle un afecto especial: “Fueron ocho años en Cruz Azul, le tengo un gran cariño a la institución, a la cooperativa, pero lo más importante es el profesionalismo que siempre demostré en ambos equipos, cuando estaba en Cruz Azul y enfrentaba a Chivas yo “mataba” a los rivales, les “pisaba” la cabeza, todo deportivamente hablando, no los dejaba correr, no les daba oportunidad”, detalló Castañeda.
Eso sí, ambas instituciones de las más importantes del país: “Para mí estos dos clubes son de los más grandes de México, Chivas por la tradición, sus estrellas, siempre fue el equipo más popular, todas sus hazañas las dejó estampadas en la camiseta, Cruz Azul también, es el equipo que a más finales ha llegado, cuenta con ocho títulos, cuando se enfrentan entre sí está en juego el orgullo”, expresó Lupillo.
Con ambas camisetas el también ex jugador de León y Atlas tiene anécdotas que contar…

COMO ROJIBLANCO
Hace poco más de una década Castañeda vivió una batalla épica frente al conjunto celeste, todo ocurrió en el Clausura 2003, Chivas y Cruz Azul protagonizaron un duelo de tú a tú por un boleto a la Liguilla.
“Fue un repechaje, en el partido de ida perdimos 4-1, yo tenía tiempo en la banca, el “Yayo”(de la Torre) no me utilizaba, pero yo lo entendía, apoyaba al equipo, entonces para el de vuelta me dice “vas a jugar”, yo me puse feliz”, añoró Lupillo emocionado, tomó un respiro y continúo: “En el partido de vuelta empezando el partido nos metieron el 5-1, no sé cómo pero remontamos, anotó el “Tiburón” Sánchez, Omar Bravo, Jonny García y Jair García, el global nos dio el pase, son anécdotas para la historia, no sé si fue la mayor remontada pero si una de las mayores”, recordó Lupillo al mismo tiempo de mostrar el cuadro de esa hazaña.

COMO CELESTE
“Recuerdo un partido en la noche en el estadio Jalisco, fue un juego impresionantemente bien jugado, en una jugada Gaby García se fue sólo frente a (Norberto) Scoponi, lo sacó, yo venía corriendo, la cancha estaba resbalosa, él dispara a gol pero sacó un “churrito”, ya no pude reaccionar, yo esperaba el tiro fuerte, pero no fue así, me quedé con las “patas” cruzadas viendo como entraba el balón, fue una desesperación terrible no poderme pararme, con ese gol perdimos”, recordó Lupillo, refiriéndose al partido de la jornada 6 del torneo de Invierno 1996.
“Me dolió mucho ese partido, el Gaby siempre sacaba “churritos”, pero así fue casi campeón de goleo en esa temporada”, remató el ex celeste riendo.

SÍ PESAN
Sea una u otra, pero ambas camisetas pesan al momento de portarlas: “Son dos de las tres playeras que más pesan, la otra es la del América, es cierto que Pachuca, Pumas, Toluca y León han sumado campeonatos, pero no es lo mismo, Chivas y Cruz Azul siempre están obligados a ganar, es una bonita presión”, remató Lupillo.