LA ilusión de llegar al Mundial de Clubes inunda todo Coapa. Pese a esto las Águilas descansaron antes de su trajín de dos semanas donde definirán el rumbo de su temporada. Por una parte la Liguilla está en sus manos. En el otro plano la Liga de Campeones de la Concacaf es prioridad. Con Tigres como rival, el ave no se achicará.

El capitán Rubens Sambueza alzó la voz. El entusiasmo en sus palabras se notó, quiere ser un histórico crema, para ello quiere un “doblete”, título en Liga y Copa. “A veces es difícil cuando no hay muchos jugadores, eso lo suples con ganas, con entusiasmo por lo que estás jugando. No todos los días se puede jugar una final para el Mundial de Clubes, es un torneo internacional y nosotros estamos muy entusiasmados, entonces, aunque no haya tantos jugadores, los que estén tienen que responder siempre por el orgullo, más que nada para ganar cosas importantes”.

El pelotazo en la cabeza que recibió en la semifinal de vuelta ante Santos aún retumba en la mente de Sambu. “Tengo que seguir en control, no es nada agradable. Fue un golpe fuerte, no hubo nada, derrame de sangre, nada, solo un golpe que me hizo marear un poco, un poco de vómito, por eso me quedé esa noche en el hospital”.

Se concentra en mantener el buen paso en La Corregidora, pero es consciente de que los Gallos Blancos saldrán a buscar la victoria.

“Sí, Gallos es un equipo complicado, que tiene buenos jugadores y que se está jugando su entrada a la Liguilla. Tomaremos el partido con toda la seriedad posible y buscaremos salir con tres puntos importantísimos”.