13, noviembre 2015 - 19:11
nota-clavados-jimenez-adriana
LA clavadista de altura Adriana Jiménez perdió todos sus privilegios en las instalaciones del Comité Olímpico Mexicano por falta de recursos de la Federación Mexicana de Natación. Al no tener hospedaje y alimentación tiene que sortear largas travesías en la ciudad de México, noticia que recibió a su regreso de Indonesia, donde formó parte de un documental que presenta las bondades naturales de ese país.
Le ofreció la Federación a la clavadista hacer uso de las instalaciones del Centro Nacional de Alto Rendimiento y Talentos Deportivos (CNAR), pero el problema que afrontaría es la falta de entrenadores, ya que Jorge Rueda y Giann Tejada trabajan en las instalaciones del Centro Deportivo Olímpico Mexicano.
“El CDOM es mi casa, he estado aquí desde los 13 años, me gusta mucho lo que son las instalaciones y el ritmo de vida que tienes cuando estás aquí, es mucho más fácil que recorrer dos horas y media de lo que es tu casa aquí, y otras dos horas y media de regreso, son cinco horas manejando, para un atleta es un desgaste, aparte de entrenar, hay que adaptarse a todo y esforzarse un poco más para cumplir, no hay de otra”, declaró.
Adriana comenzó su preparación de cara a la temporada del 2016, con algunos cambios dentro de la Serie Mundial; se aumentó de tres a cinco fechas en la rama femenil y para el 2017 se agrega un cuarto clavado (dos obligatorios y dos libres) más a la lista sobre la plataforma de 20 metros. Esto hará la competencia más peleada dentro de una disciplina que pretende ocupar un sitio dentro del programa de los Juegos Olímpicos.
“Este año fue muy enriquecedor, tuve altibajos muy fuertes, aprendí de las competencias que no me fue muy bien y las que me fue muy bien, quiero ser más constante y estar más veces en el podio. Tengo bien marcado mi objetivo y espero lograrlo algún día”.
El año próximo tendrá la Copa del Mundo como el evento más importante, ya que es clasificatorio para el Campeonato Mundial de Natación del 2017.
ADRIANA Jiménez.