Frente a las cenizas de Juan Gabriel contenidas en la urna sobre el pedestal colocado en el vestíbulo del Palacio de Bellas Artes, el secretario de Cultura de México, Rafael Tovar y de Teresa, afirmó del artista michoacano, cuyos restos reposarán en Ciudad Juárez, Chihuahua; desde hoy, que: “ Estos días, México entero se ha volcado para honrar a uno de sus grandes exponentes de la música popular. Este palacio ha vivido junto con la gente días históricos, horas marcadas por la convivencia y unidad ante la imagen de un creador cultural que hermanó a los mexicanos”.

Tras saludar al heredero Iván Gabriel Aguilera Salas, la señora Simona Hackman de Aguilera, su cuñado Jesús Salas y la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), María Cristina García Cepeda, resaltó Tovar que el final de esta jornada en que se le rindió homenaje al gran Juan Gabriel, se albergó a más de 700 mil personas, entre las que ingresaron al recinto máximo cultural del país como en las inmediaciones y calles aledañas.

“Juan Gabriel como patrimonio cultural de México, lo vuelve universal, en un lugar privilegiado que ocupa en el lugar de la gente. La gente, que como río arribó llena de gratitud para su trovador. Su muerte deja a México con una profunda tristeza que encuentra consuelo en el inmenso agradecimiento de nuestras generaciones por su legado”.

Aún con más de 15 arreglos florales que enmarcaron la urna en el vestíbulo, confirmó Tovar y de Teresa: “Hablo en nombre del Gobierno de la República, agradecemos a todos su emotiva y respetuosa respuesta a esta ceremonia que el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, ofreció con las puertas abiertas del Palacio de Bellas Artes en memoria de Juan Gabriel. Todos somos una identidad profunda que nos habla de México porque la cultura es comunidad, en ella se forma y de ellas brotan valores, tradiciones, costumbres y memoria histórica. La cultura nos da continuidad y significado, identidad y patrimonio, la cultura nos da vida porque en sus raíces está la eterna lucha contra la muerte.

“Revivir los conciertos de Juan Gabriel nos confirma que sus canciones conjugan sentimientos y valores que nos caracterizan, heredero de las grandes voces populares del país. Juan Gabriel cantó a las personas cara a cara, les entregó sus canciones en auditorios multitudinarios y en plazas públicas que son símbolo de identidad múltiple que se transforman con el tiempo para darle materia al canto en el que continuamente nos resignificamos”.

En su mensaje, tras más de 41 horas de homenaje a Juan Gabriel, afirmó: “Desde sus inicios como intérprete y compositor hasta la última de sus canciones, Juan Gabriel fue siempre un continuador fiel de nuestra tradición musical, absorbió también de manera natural la herencia creativa de José Alfredo Jiménez, de Tomás Méndez, de Cuco Sánchez, de los grandes compositores que a su vez aprendieron que la tradición popular anónima y que hicieron del canto una expresión colectiva con la que asumimos y asimilamos la vida con sus dolores y alegrías.

Afirmó: “La mayor influencia de Juan Gabriel fue sin duda Juan Gabriel mismo”.

Y concluyó: “Juan Gabriel en 1998 dijo: ‘No quiero ver caras tristes, yo quiero verles alegres, quiero que canten y bailen. Así estoy a su lado. Por eso se le dio una celebración cultural de todos en torno a Juan Gabriel. En una fiesta respetuosa del adiós a Juan Gabriel y agradecerle siempre por su música. Aquí en este recinto, casa de la cultura de México y de todos, le decimos ¡Adiós! ¡Gracias! ¡Viva Juan Gabriel!”.

Desde las 18:00 horas de ayer, arribó Iván Gabriel, junto a su esposa Simona y su tío Jesús Salas. Alrededor de las 21:30 horas, el heredero tomó la urna para llevarlas de regreso a Ciudad Juárez, Chihuahua; donde reposarán en el museo “Juan Gabriel”.